Ya no hace falta legalizar con la Apostilla de La Haya todos los documentos públicos. El 16 de febrero de 2019 entró en vigor el Reglamento 2016/1191, que facilita la libre circulación de los ciudadanos. El Reglamento elimina los requisitos de legalización de documentos públicos dentro de la Unión Europea. Se trata de los siguientes certificados: nacimientos, estar vivo, defunción, nombre, matrimonio, estado civil, divorcio o separación, pareja registrada, filiación, adopción, residencia, nacionalidad o antecedentes penales.
A partir de este momento, no será necesario legalizar con la Apostilla de La Haya estos documentos. Todos los países tendrán el mismo modelo estándar de certificado. Tampoco hará falta traducirlos, ya que los modelos son multilingües. Los gastos de los certificados no pueden superar el coste de su producción.